Inteligencia Emocional
¿Sabías que la clave del éxito, de una persona, no depende en su mayor parte de los conocimientos que tiene?
No consiste únicamente en lo que sabes, sino que el éxito depende un 10% de tus conocimientos y un 90% de tu Inteligencia Emocional (Daniel Goleman)
A lo largo de mi existencia me he ido dando cuenta de la importancia que tiene la Inteligencia Emocional para liderar nuestra vida y potenciar también el bienestar social y personal.
Como no me gusta contar cosas a los demás que yo misma no haya experimentado, os puedo asegurar, que si entrenas la Inteligencia Emocional (a cualquier edad) se convertirá en un recurso de gran utilidad para gestionar vuestra vida.
Este es uno de los motivos que me han llevado a estudiarla y poner en práctica sus recursos.
Para darle una definición más concreta, decimos que la Inteligencia Emocional es el conjunto de capacidades y habilidades que nos ayudan a reconocer, entender y gestionar nuestras propias emociones y las de otras personas. Además, regula nuestras emociones y utiliza esta información para desarrollar un comportamiento adecuado y adaptado a los objetivos que nos hemos propuesto.
Aunque las emociones tienen un origen primitivo y, aparentemente, un funcionamiento irracional por ser una respuesta impulsiva y automática, podemos considerarlas como inteligentes ya que logramos entrenar, controlar y modificar al igual que las habilidades humanas. También comprendí que son necesarias para la vida, ya que toda emoción tiene una función concreta, que nos informa sobre algo que ha ocurrido o está sucediendo. No son buenas ni malas. Lo que ocurre es que algunas son más adaptativas que otras, pero lo importante es ser conscientes de ellas y entender la información que nos transmiten-
Por lo tanto, la Inteligencia Emocional es la capacidad que tenemos, y que además podemos desarrollar, para manejar de forma más eficaz las emociones y generar, a partir de ellas, motivaciones beneficiosas para cada uno de nosotros.
De esta forma conseguimos afrontar mucho mejor los retos y objetivos que nos proponemos, al tiempo que potenciamos el bienestar personal y social.
La inteligencia emocional es la capacidad humana que nos permite:
• Tener una actitud positiva ante la vida.
• Ser conscientes expresar y regular nuestras emociones manejándolas de forma adecuada.
• Detectar y manejar las emociones y sentimientos tanto los propios como los ajenos.
• Comprender, expresar y gestionar esas emociones y sentimientos con empatía y asertividad
• Sobre todo permite adaptarnos eficazmente, tanto a nuestro mundo interior como al exterior, tomando decisiones adecuadas a través de la motivación, interés e ilusión para enfrentarnos y afrontar problemas o situaciones...
¿Para qué necesitamos entrenar la inteligencia emocional?
Para ayudarnos a disminuir el desgaste psicológico que nos producen determinadas circunstancias y permitir afrontar mejor las dificultades que nos surjan en la vida.
Además nos ofrece recursos y habilidades emocionales para manejar tanto las emociones "positivas" o agradables como las "negativas" o desagradables, ya que ambas son necesarias para nuestro día a día.